Hola a tod@s!
Hoy os traigo un plato algo calórico, pero sin duda una delicia para el paladar ...y por eso, como dice el refrán: Una vez al año, no hace daño
Para esta receta, vamos a necesitar:
- 2 huevos
- 2 o 3 patatas grandes
- bacalao
- aceite
- sal
- 1 guindilla
- 3 ajos
Empezamos haciendo el bacalao, para ello lo desalamos como siempre (con agua fría, cambiando el agua un par de veces). Ponemos en una sartén: aceite, una guindilla y los tres ajos picados (esto último, lo haremos cuando el aceite esté caliente). Cuando se le quite el color crudo a los ajos, echamos el bacalao, lo rehogamos y dejamos que se haga. Estará listo cuando desaparezca todo el agua que suelta el bacalao
Ahora ponemos otra sartén con bastante aceite para hacer las patatas, las cuales pelaremos y cortaremos en láminas redondas de un grosor pequeño. Cuando el aceite esté caliente, las incorporamos y removemos.
Para que las patatas estén listas, tenemos que comprobar que están blanditas y que podemos fácilmente partirlas con una espátula o un tenedor de madera.
Cuando las patatas estén blanditas, con ayuda de otra sartén (donde haremos los huevos) y un colador, quitaremos todo el aceite que hemos utilizado para hacer las patatas y lo emplearemos para hacer los huevos
En la sartén en la que hemos hecho las patatas, incorporamos éstas (libres de aceite) y el bacalao que teníamos apartado. Lo mezclamos.
Hacemos los huevos fritos, echamos uno de ellos junto al bacalao y las patatas, y lo rompemos (de ahí huevos rotos)
Emplatamos la cantidad deseada, echamos el otro huevo y lo rompemos. BUEN PROVECHO!
No hay comentarios:
Publicar un comentario